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La avellana, plantamientos de futuro
Año tras año se viene celebrando, en nuestro concejo, el Festival de la Avellana, cuyo fin principal es la promocion y la comercializacion de las avellanas.
Han pasado 25 anos desde aquel primer festival y, en el transcurrir de estos, son muchas las cosas que han pasado en nuestra sociedad y, como no podia ser menos, estos cambios conllevaron una modificacion en los habitos de consumo en los ciudadanos, tendiendo, en la actualidad, hacia el consumo de productos con gran calidad sanitaria, entendiendose por tal todos aquellos productos en los cuales, para su obtencion, se haya minimizado al maximo la utilizacion de productos quimicos y de otra indole cuya finalidad fundamental es el aumento de la produccion en detrimento de la calidad y, consiguientemente, un aumento de la rentabilidad economica de los cultivos y un abaratamiento del precio de estos en el mercado.
El Festival de la Avellana puede ser, y es, un buen elemento de promocion del producto, de un producto ecologico, en cuyo cultivo se sigue un sistema tradicional que consiste, fundamentalmente, en el establecimiento de las plantaciones de avellanos en las zonas marginales de las fincas, riberas de los rios, terrenos de aprovechamiento comunal etc. , y practicandoles, solamente, las labores de abonado con estiercol organico y alguna poda.
El festival, por otro lado, en cuanto a la comercializacion, se queda corto, apenas alcanza la venta el 15 % de la cosecha total. El resto se pierde, casi en su totalidad, por falta de canales adecuados de comercializacion.
No nos cabe la menor duda de que esto fue uno de los objetivos que se pretendieron buscar con la realizacion del Festival de la Avellana, pues en las bases del mismo existe un apartado especifico para premiar aquellas iniciativas encaminadas a establecer una adecuada comercializacion de las mismas, apartado que, ano tras ano, queda desierto.
El desarrollar un proceso de comercializaci6n para nuestra avellana o incluso para avellanas de concejos limitrofes o de otros concejos tambien productores dentro de la region, estamos convencidos que pasa en primer lugar por dar una imagen comercial al producto que, actualmente, tiene una demanda potencial en el mercado , y que podria ser una "DENOMINACION DE ORIGEN" un "LABEL" de calidad o cualquier otra formula que garantice al consumidor un producto con unas caracteristicas determinadas, tanto organolecticamente como desde el punto de vista del sistema de cultivo. Deben ser las administraciones locales y autonomicas quienes tengan la responsabilidad de promover este tipo de denominacion, pero tambien los productores tienen la responsabilidad de ofertar un producto de caliiad seleccionado, con una presentacion adecuada y conservando la formula tradicional del cultivo, concentrando la oferta, para que apoyandose en esa denominación específica hagan llegar el producto a los centros los ccntros de consumo, a tiendas especializadas, grandes superficies, etc.
Si somos capaces entre todos de poner en marcha esta iniciativa, habremos dado un gran paso adelante en la recuperación de un cultivo tradicional de nuestra tierra que puede ser una fuente complementaria de ingresos, fudamentalmente, en las explotaciones de montaña.
